sábado, 2 de mayo de 2009

Carta de un amigo triste

(*)

Querido Patrón.-
…¿querido?…¡Bueno,…sí,…querido…(aunque Patrón…en fin!)…
Desde hace unos días ando dando vueltas y vueltas…salvándome por casualidad de algunas ruedas…de algunos palos…de algunos zapatazos…de algunos lazos!…
Si andaba medio cortado podía haberlo dicho!…¡Nos achicábamos un poco…y quién le decía…no?
Yo entiendo todo,…lo de las tasas de interés y los créditos con las cuotas infernales,…lo de la devaluación,…los sueños de las grandes vacaciones echados a pique antes de salir de casa,…las compras de tantas cosas necesarias postergándose casi para siempre…o para nunca,…los resentimientos y las frustraciones por la locura cotidiana de ganarse la vida…
la alieanción desenfrenada de los que a pesar de todo debemos considerarlos humanos,...el despojo despiadado que asestan los corruptos abominables...
Los perros no hablamos pero entendemos muchas cosas!…Los perros no necesitamos hablar más…Hemos hablado hace muchos siglos…pero comprendimos que se desnaturalizaba todo con la palabra y preferimos callarnos…y usar solamente los ojos…¡y la cola!…
¡Patrón,…con un paquete menos de cigarrillos por día…seguro que le alcanzaba para comprarme unas cositas…(¡o sacrificando alguna copita!…digo!)
Los perros somos parte de la Naturaleza y comemos hasta donde necesitamos y nunca vamos un bocado ni un trago más allá de lo que es justo…(¿Ud. me entiende…no?)
Si hubiese procedido así…de paso se cuidaba un poco la salud, que mal no le iba a venir…eh?!…
En realidad Ud. estaba en su derecho,…me dio el pasaporte y ¡punto!…tengo que aguantármela…pero qué método eligió, viejo!…¡¿Cómo se le ocurrió eso de tirarme la pelotita desde el coche y cuando salí a buscársela…aceleró y desapareció!…¡¿Sabe cuánto corrí!?…¡Pero no pude!…
¡Y yo que creía que íbamos de paseo!…
¡No se imagina cómo me derrito cuando veo un auto parecido al nuestro y me confundo creyendo que se arrepintió!…
Si por ahí se le ocurre,…digo,…esté atento…porque ando medio
cambiado…sabe?
Cuando vagamos,…los perros tomamos otro aspecto,…nos ponemos opacos y con olor a miseria…
¡Mire bien…por favor!…
El perro vagabundo es un ser incompleto que se arrastra por la vida buscando al amo que perdió en un recodo del cariño…
¡¿Patrón!,…se olvidó de lo que dice siempre mi amigo (el que ahora está llevándome la pata para escribirle esta carta),: “Si pensó abandonar su perro…mírelo antes a los ojos”?!…
¡Bueno Patrón…ahora lo dejo yo…¿qué tal…(¡y bueh…llegó el desquite!),…me están echando también del correo…
Chau
Guau
P.D. : Si los chicos me extrañan…mejor dígales que me escapé…¡No vaya a ser que se enteren de la verdad …y por ahí no quieran perdonarlo en toda la vida!…
…………………………………
Carlos Alberto Giangrante
Del libro “MEMORIAS DE UN LATINOAMNESICANO” EDITORIAL BAOBAB
(*) Este es Tupac. Alguien lo abandonó. Pero también alguien lo está cuidando, esperando que Alguien quiera ser su amigo para siempre. Es muy cariñoso y detesta la violencia. Si querés ser su amigo para siempre, contactate con Belén:
mail: beleninet@gmail.com
Cel: 15 6511 - 7760